EL BORDE DE LAS MEDIAS

“No todo lo que vemos, es lo que pensamos”

El ser humano tiene la capacidad de ocultar lo que verdaderamente es, esto por querer ser aceptado dentro de una sociedad que, de paso está llena de prejuicios y defectos. El hombre por estar en búsqueda de esa aceptación termina engañado y manipulado.

Los políticos tienen un olfato desarrollado para detectar a esas personas que desean ser aceptadas y, que sea el otro quien le resuelva sus problemas, es ahí donde el político se pone el mejor traje y prepara su mejor discurso para llevar a su orilla a los incautos.

El individuo como vendedor que es, siempre mostrará y ofrecerá lo mejor de su producto cualquiera que sea. Muchos lo hacen no de mala voluntad, pero siempre con el mismo propósito, el ser aceptado.

El hombre en su tarea de buscar la aceptación ante el otro, termina auto engañándose y engañando al otro, el miedo a mostrar lo que realmente son , su resultado es creer lo que le dice y lo que ve.

El borde de las medias. ¿Qué hay debajo del borde de la media? Así mismo son la mayoría de la gente, mostrando el borde, pero no muestran sus huecos “Vacíos”, su sucio “Defectos” y mucho menos su olor “ esencia”.

El borde de las medias. Eso es lo que la gente muestra, porque tiene algo que les ayuda ocultar su verdadero yo. Todos ven el borde, pero no se imaginan qué puede haber más allá de él.

Si la gente se tomara el tiempo de ver y analizar más de lo que puede mostrar el borde, en el mundo habría menos gente engañada por políticos o por todo aquel que desea vender su mejor artículo. El individuo que busca ser aceptado generalmente sólo ve el borde de las medias y se deja llevar por quien las usa.

La duda, clave para no ser engañado, esta es la máxima del filósofo y matemático francés René Descartes, él en su libro El Discurso del Método nos dice, “La facultad de juzgar y distinguir lo verdadero de lo falso, que es propiamente lo que llamamos buen sentido o razón, es naturalmente igual en todos los hombres; y, por lo tanto, que la diversidad de nuestras opiniones no proviene de que unos sean más razonables que otros, sino tan sólo de que dirigimos nuestros pensamientos por derroteros diferentes y no consideramos las mismas cosas”.

Cuidado con el borde, nadie va a mostrar lo peor de sí, aquí el engaño puede ser mutuo, por el que muestra o por el que ve, hay que tomar un tiempo para analizar lo que se ve y se muestra, el borde siempre se verá perfecto cuando se quiere impresionar.

Cuando no se ve el borde y la piel está al descubierto, puede haber algo de sinceridad en la presentación, pero esto no indica que no pueda existir el fraude y el engaño de quien no le importa el borde.

“Todo borde nos puede llevar al éxito o al fracaso, según la dirección que se tome”.