EL CAMBIO NO ESTÁ EN EL SOCIALISMO.
“La igualdad en el hombre está es en la tarea de buscar trabajo”
La juventud anda desesperada en buscar cambios en terrenos contaminados de ideologías, doctrinas y falsas filosofías, cambios que quieren destruir al otro, sometiendo al débil y condenando a quien no piense como ellos.
Los jóvenes tienen que aprender mucho antes de exigir, opinar, calificar y descalificar a quienes con su trabajo han logrado concentrar grandes capitales, a los que triunfan en los negocios y en las relaciones interpersonales.
Hoy el humano quiere ser respetado cuando el no respeta, quiere que el mundo aplauda sus preferencias sexuales, sus vicios, sus mañas y que le acepten su ignorancia que es grosera y atrevida.
Los cambios no nacen sólo de las ideas y mucho menos en propuestas utópicas, ahí los jóvenes andan en sentido contrario, pues la vida es otra cosa, para lograr cambios hay que tener responsabilidad, disciplina, moral y ética, no sólo sentimientos patrióticos.
El cambio no está en el socialismo… Los idealistas marxistas, leninistas y castristas, piensan que el mundo debe girar a su alrededor y todo les deben obedecer sus caprichos y aberraciones, pero el cambio no es comunal, es individual donde el esfuerzo y el sacrificio son sus mayores pilares.
El cambio no está en el socialismo. El cambio está en la libertad individual, una libertad que fortalece los valores y el capital, donde la propiedad privada es parte fundamental de la libertad de pensamiento y acción.
Los cambios de gobierno a nivel mundial están enfocados en sentimientos socialistas, en busca de una igualdad que no se encuentra ni en los cementerios, porque, así como la gente muere de diferentes razones, de la misma forma se les entierran.
Hay que desterrar ese socialismos religioso y político que divide, que además abre una brecha enorme entre el hombre libre de pensamiento y el adoctrinado, en ese individuo que apuesta a sus esfuerzos y le compite al capitalismo, ganándole muchas veces la partida.
Los jóvenes deben enfocarse más en sus metas personales que en las metas que le vende un demagogo para satisfacer su morbo y sus caprichos, haciendo ver que el socialismo es la solución a sus fracasos existenciales.
En el socialismo no está el cambio, la poetisa chilena Lucila Godoy Alcayaga mejor conocida como Gabriela Mistral con su amor al capitalismo les enseñaba a los jóvenes lo siguiente “Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú. Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, hazlo tú. Sé tú el que aparta la piedra del camino”
No se puede encontrar el cambio contado con las decisiones y acciones de los demás, ellos siempre lo harán a su manera, dejando al otro peleando con alguien que ni siquiera sabía cuáles eran sus deseos.
“El socialismo es la trampa del cazador que, utiliza el hambre de la víctima como oportunidad”
