¡YA NO SOMOS LOS MISMOS!
--
El miedo al qué dirán, no nos deja avanzar.
El socialismo del siglo XXI llevo a Venezuela ; de ser un país petrolero a un país limosnero, desde el primer gobierno del difunto que aun no sabemos de que murió y, hablo del que regreso muerto como el Negro Primero de Cuba como lo dijo Jacinto Pérez Arcay en el funeral de Chávez , sus políticas populistas obligaron a la industria petrolera hacer el sustento de todos sus programas sociales convirtiéndola en la caja chica de la revolución , su modo de gobernar paternalista hizo que el país más rico de América Latina hoy se encuentre en quiebra.
Uno se cansa de escuchar ¡este país no sirve! Cuando la verdad es otra, no es el país, son los que dirigen o gobiernan el país y algo peor, con la complicidad de la gente que los mantiene ocupando aun sus cargos. No podemos ocultar una verdad que, aunque duela, pero hay que decirla, ya somos pobres, ya no somos los mismos, los que con su sueldo por muy bajo que fuera lograba con el cubrir sus gastos elementales. La clase media desapareció y el miedo al que dirán, al no aceptar que ya no tenemos ni para poder meter los pies bajo la mesa tres veces al día, nos vuelve paralíticos ante el sistema que nos está asfixiando.
No más apariencias, aceptemos la realidad, somos pobres y cada día que pase con este sistema socialista seremos aun más, lamento decirles que ese el plan por parte del régimen, llevarnos a la igualdad pero en la miseria, si esto sigue así, sin tener ninguna reacción por parte del ciudadano, sólo porque está preocupado en como buscar comida para alimentar a sus hijos y, es algo no criticable por razones de supervivencia, pero si podemos sacar tiempo para demostrar nuestro descontento ante este régimen que nos lleva al Holodomor… ¡Sí! Holodormo palabra proveniente de Ucrania y, significa matar por hambre, en la época de Stalin entre 1932/33 el genocidio por hambruna llego a los 10 millones de muertos, solo por mantener el ego y poder de un tirano.
Ya no somos la admiración de América del Sur, el socialismo convirtió a la sociedad venezolana, en ser una de las que más lastima da en el conteniente.
Hay que enfrentar la verdad y con ella poder lograr saber en dónde estamos parados; al borde del abismo, que muchos aun se resisten en creer.
¿Qué se pude hacer? Aceptar la verdad y no esperar a tocar fondo, porque el fondo es subjetivo y unos llagaran más rápido a él, que otros. Enfoquemos nuestro esfuerzo en una sola causa, si remamos hacia la misma dirección lograremos llegar a la meta, de lo contrario nos destruiremos a mitad de camino, no sigamos peleado por los efectos, luchemos por atacar la causa, la causa tiene nombre, apellido y que ahora también tiene nacionalidad.
Venezuela se convirtió en una sociedad confundida como la que describe Víctor Hugo en LOS MISERABLES; “Pertenecían estos seres a esa clase bastarda compuesta de personas incultas que han llegado a elevarse y de personas inteligentes que han decaído, que está entre la clase llamada media y la llamada inferior, y que combina algunos de los defectos de la segunda con casi todos los vicios de la primera, sin tener el generoso impulso del obrero, ni el honesto orden del burgués.”
La sociedad debe tener un orden, de lo contrario la anarquía reinara en ella y, para ayudar a este país llamado Venezuela hay que hacer dos cosas, salir del sistema dictatorial y luchar porque se restablezca la Isonomía en él.
El hombre que ignora la política, se convertirá en una víctima de la misma.